Poem-ON para tiempos en OFF
Series de fotografías de Edu Barbero con poemas de autores amigos / 2020

Es un proyecto ideado con el objetivo de activarnos mutuamente en el confinamiento por la COVID-19. Imagen, amistad y poesía se dan la mano en una época de no besos ni abrazos para mantener la creatividad encendida, para reforzar los lazos, para expresar cómo vive cada uno su reclusión en tiempos de pandemia.
poemas de Teo Serna
Confinado en Manzanares (Ciudad Real)
Imágenes: trayecto de tren Madrid-Barcelona / 2016
I
Duerme la luz y el cielo es de ceniza.
Todo parece quieto, sin embargo,
un lejano temblor se extiende, largo.
Y la distancia escribe con su tiza.
II
Hay una lejanía, un horizonte
como un callado mar que se perdiera más y más, sin tocar la luz siquiera: yo sé que es el refugio de Caronte.
III
Un camino vacío, sin los pasos
que le dan su sentido. ¿Qué nos hace
ser, vivir, esperar el desenlace?
Siempre es la luz quien trae los ocasos.
IV
Allí va la mirada, allí se pierde;
allí es la distancia piel, redoma,
un pájaro, un recuerdo de paloma...
Remanso del color, del gris, del verde.
V
¡Fue todo tan fugaz como un sonido, como estela de un tren que llega tarde, como ascua que, quemando, ya no arde, mas consume su vida y su latido!
poemas de JOSÉ GARCÍA OBRERO
Confinado en Córdoba
Imágenes: varias localizaciones / 2015 - 2016
I
El espacio abre rendijas para que lo inunde la luz.
Emergen las intuiciones como tierra entre brumas.
¿Me percibes más allá de los límites? Yo te percibo
como una orquesta de cuerda bellamente afinada.
II
¿En qué rincón se enciende el pensamiento?
Llega primero tu tacto, después tu voz, al final,
revolotea tu imagen: pájaro que abandonó
en un descansadero a su bandada de palabras.
III
Vértice donde confluye la luz del pensamiento.
Se derrama un deseo por las suaves laderas de la intuición.
La misma mente que irradia hasta cegar, define el paisaje;
lo crea y lo destruye. Una palabra se cierra en sí misma.
IV
Se abre en círculos la delicada superficie del silencio,
se agita en su interior el perfil velado de lo mudable.
¿Oyes el trino de los pájaros ausentes que cruzan la sombra?
La memoria crea una luz desde la que tu voz se descuelga.
V
Primero, tu voz; luego, el paisaje que proyecta la luz;
ahora, esta memoria en cuya bóveda busca instalarse
y acaba fracasando en su deseo. Manantial que no cesa
en su fluir, que nos destruye y crea, que me inventa.
poemas de Eva Iglesias Bilbao
Confinada en Madrid
Imágenes: fotografía digital intervenida Barcelona / 2019
Y luego a la mañana,
las arremetidas del tiempo
junto a la boca
de la memoria.
Ahogándome puedo respirar aún,
el vacío que penetra por mi boca
invadiéndome las entrañas,
mordiendo la nada.
Y aquí estoy,
en los márgenes de las metas y sus falsos trofeos
tras haber pasado el testigo de la derrota
a murciélagos y lechuzas.
En el silencio puedo oler
el antídoto contra el miedo,
disfruto con el riesgo
de la verdad infinita.
No tengo miedo en lo oscuro,
en lo invisible,
allí donde la realidad
d e s a p a r e c e.
poemas de Juan carlos peña
Confinado en Barcelona
Imágenes: Pirineo Navarro frontera con Francia / 2016
La imperfecta luz de los espejos.
El peso de lo Invisible.
El tamaño de los mares desbordados.
El exceso de luz. Las sombras.
Siguen en pie los signos.
Rememoran lo probable y las ausencias.
El río que transporta las palabras
guarda en su lecho el silencio y las promesas.
El empuje de un presente incompleto.
Las heridas abiertas en el frío.
Los pedazos de cielo cayendo a plomo
sobre la piel del génesis y el sueño.
No es fácil seguir la corriente.
A los lados los muros defensivos.
Sobre la hierba estoica,
los hilos que ahuyentan el desánimo.
Entre el conocimiento, las tinieblas
y el duro lienzo de las dudas :
los caminos, viejos Prometeos,
siempre con su carga a cuestas.
poemas de felipe zapico
Confinado en un lugar de La Mancha
Imágenes: varias localizaciones / 2016-2018
Arañar la placa quebrando las uñas en el intento
marcar las iniciales
sobreactuar incluso, morder el polvo;
mientras me reflejo en el dorado del tequila reposado.
Algarabía de gorriones alegres del ensayo de apocalipsis,
otoño tardío atragantado al paso tren de borrascas
encadenadas.
Cifras irrelevantes vociferando muerte.
Silbar para espantar el horror
deslizar rumores bajo las puertas
deletrear miedo, silencio, mentira,
obediencia y control.
No seguir la línea de puntos
blanquear las instrucciones y toda ordenanza
ignorar los himnos y otras zalamerías
ocultar el miedo, tras las medianerías.
Desde lo profundo del semisótano
entre las emanaciones de radón
todo se va volviendo odio.
No hay gateras, los gatos campan por los bulevares libres al fin.
poemas de javier gm
Confinado en Xirivella (Valencia)
Imágenes: respiraderos en Florencia / 2017
Me metieron en casa a perderlo todo
la fiebre el pico la pala la pala la pala
la pala bra las alas y así empieza otra noche.
Abro una caja de zapatos sin ropa
Coloco una percha muerta en el aire
Limpio con el paño mi vaho intervenido
En un agujero siempre se libera la negrura.
Ladrón de luz en el cuento de los tristes y.y da igual estación si eres confinado y.
y. besos de tinta para el tremendo hielo que me acoge y.y Tiranos: yunque, lima,
tenaza, cortafrío y sufridera y.y me han pisado la castañera, el carretero y el capital.
Aguanto como un viejo rodillo. .Y.
¿dónde escondéis las banderas? Bárbaros Románticos
¿en qué oscuridad escondéis vuestro rango? Fanáticos Fantásticos
Venid a nosotros libélulas, pájaros, árboles y ornitorrincos / Esto era la vida:
La pálida. Sonrisa de. un niño. un niño. un niño.
utópico - el dormido polvo de los libros ya despierta -
rocío – perteneces a la redención de todos los versos del cansancio húmedo -
señuelo – he abierto el frigorífico e hice cómputo de transcendencias -
respiradero – en tu cicatriz el chirrido de los columpios, balas, amor, desfalco –
poemas de Miquel-Lluís muntané
Confinado en Barcelona
Imágenes: estatuas, Florencia / 2017
I
Entre la llum captiva en el silenci
i l’ull retret del guardià que sotja,
creix a la pell l’imperatiu dels dies:
palpar el contorn de totes les mesures.
II
Són pocs i breus els dies de victòria
i només un el pas per trencar el setge.
Cada record és un monyó que sagna
i va deixant un rastre en la fugida.
III
Un tornaveu que ve del fons dels segles
tiba l’impuls de desvetllar la greda.
Tot és batec i res no desempara
la plenitud del cos que ressuscita.
IV
S’afua el temps en un riell de lluna.
Terra fecunda, foc sense quimera,
aire polit, estremiment de l’aigua.
En un mirall hi cap tota la vida.
V
El verb aprèn del verb en boca d’altri
i enllà del mar sorgeixen noves illes.
Si dues mans a dues mans s’aferren,
s’estreny el fil que va teixint la xarxa.
poemas de lola lópez-cózar
Confinada en Loja (Granada)
Imágenes: Pirineo Navarro frontera con Francia / 2016
En un instante el alto,
la parada en seco el eco la amplifica.
Luego el silencio encubre
el vaho de una respiración apresurada.
Quizás el sosiego en la humedad de la maleza, quizás la fuga en la espesura del relente,
o el extravío en el claro de un mapa
forzando a actuar de modo urgente.
No hay tiempo sin esquinas,
agujas, minutero, manecillas,
estiran hacia el vértice de bruma la sed de un sol que cierra su fervor y así se apaga.
El feroz movimiento de la búsqueda
afila las aristas de su ascenso.
El frío empapa el ansia de seguir hasta la cima, el afán de trepar hasta la calma.
Tierra y cielo se miran sin defensas,
se rozan, se acarician, no hay recelo.
Las nubes abren hueco a la cumbre,
al aliento tranquilo del deshielo.
poemas de josé antonio jiménez
Confinado en Barcelona
Imágenes: casa de la madre del fotógrafo, Sabiñán (Zaragoza) / 2017
Ventilador de sombra en los visillos,
¿cuántas vasijas de dolor te llevas?
La desmemoria de la luz, rendida,
deja sus huevos blancos en la herida.
¿Nos quedamos aquí, en la penumbra quieta
del adentro, o basculamos el vendaval de luz,
con hormigas de sutura y distancia,
sobre la paz enferma de este olvido?
Templo de soledad y animales cautivos.
Lo que la luz oculta lo proclama la sombra.
Horizontes de alumbre tensan el tiempo
y crece la pantera del silencio.
La harmonía, la piel tendida de la soledad,
la oración de los grises, que es albor, caligrafía
sin palabra. La oscuridad bosteza
su perfección. En volandas desciende la belleza.
La mujer que tejió la transparencia
hunde sus manos en el venero de la noche.
Con flores de piedad y hebras de llanto,
sacian la sed del mundo en los vitrales.
poemas de carlos quesada
Confinado en Santa Coloma de Gramenet (Barcelona)
Imágenes: Galería de la Academia, Florencia / 2017
Busca la luz una belleza para siempre, una disciplina en el deseo, dar aire a las formas, volar más allá del sueño. Los ojos del corazón nunca olvidan.
A veces los cuerpos no encuentran su mirada. Algunos anuncian dignidad y prestancia.
Otros se ocultan en las sombras del tiempo. La soledad de la muerte siempre espera.
El pudor de la belleza se refleja en el espejo. Al otro lado un sátiro te devuelve el miedo, la inseguridad del ser y la blasfemia del cuerpo.
La ternura busca siempre una salida. Se anuncia el destino de un nuevo ser, de la
ilusa esperanza del futuro. Se rebela la sombra en un mar de luces y preguntas.
Desnuda el dolor la extrañeza de la muerte, anuncia la luz las huellas que el tiempo ha detenido. La sorpresa vislumbra la confusión de los cuerpos, se inicia el camino del recuerdo.
poemas de jesús cárdenas
Confinado en Carmona (Sevilla)
Imágenes: hojas marchitas en casa, Barcelona / 2017
Tan plena y no respira.
Ha bajado sus brazos.
Canto de la esperanza,
¿por qué naces y mueres?
Trofeo del otoño:
crepita en el recuerdo
el fuego del ocaso
y destella en su sombra.
Siento los cuarteados
filamentos sin sed
de un pasado desértico
interrogando a la nada.
Somos la desnudez
al final del trayecto
donde duermen las hojas
y callan las palabras.
Desde el vórtice solitario
contemplo hojas dormidas
como elixir del tiempo
antes que la luz muera.
poemas de antonio gómez
Confinado en Mérida (Badajoz)
Imágenes: Via San Gregorio Armeno, Nápoles / 2019
Confinados y sumisos,
esperanzados sueñan
erguirse y ornamentar
palacios, iglesias y plazas.
Más allá del silencio,
dispuestas a ocupar
las razonadas realidades
de este mundo de escombros.
Anhelando un desenlace,
aisladas por un silencio oscuro,
las bloqueadas miradas
nos advierten de placeres y dolores.
Llenas de secretos y deseos,
varadas a la espera de rumores,
el esplendor de sus ojos
busca sus bocas mudas.
Separadas del cuerpo,
buscado su origen
aguardan resignadas
la libertad de las estatuas.
poemas de óscar sotillos
Confinado en Dosrius (Barcelona)
Imágenes: poblado celtíbero de Tiermes (Soria) / 2014
Fuera de quicio
el hombre
en su ventana
mira.
Recuerda, sin duda,
veinte años atrás,
a otro hombre que saltó
de su propia ventana.
Oye un grito mudo,
su caída libre en televisión,
las miles de ventanas
estallando como cuencas de ojos.
Comenzó el siglo, dicen,
ese día,
y todos fuimos
espectadores de piedra.
El instante de aquella demolición
se prolonga ahora,
vemos crecer la hiedra
al tiempo que se erigen las ruinas.
poemas de Juan Luis López
Confinado en Sant Boi de Llobregat (Barcelona)
Imágenes: Pompeya / 2019
Duerme el arquero su derrota
en el vómito del Vesubio.
Así sangra la luz
en Pompeya.
Rastreo el olor de una ausencia
entre las columnas desmochadas.
Entre las ruinas de este silencio,
ruego el sacrificio de tu olvido.
Con el silencio penetrando
La piedra de tus mutilaciones,
¡Oh Dédalo! ¿Por qué aún sostienes
con tu lanza el ataque del ocaso?
Sobre la calzada pulida
por la furia de la montaña,
el centauro me abre la puerta
del hombre sin retorno que soy.
Cazabas en las soledades
tan frondosas de piedra y tiempo,
que de nuevo fui devorado
por la fría grieta de tus labios.
poemas de eduard sanahuja
Confinado en Barcelona
Imágenes: Piazza della Signoria y Galeria Uffizi, Florencia / 2017
I
L’esperança es conjuga en imperfet.
De poc serveix albirar l’infinit
si tens els ulls de marbre en els adeus
i tota la tendresa és punt de fuga.
II
L’horror és la tenebra i és la llum
quan perd les proporcions i esdevé llança.
No cerquis amb l’espelma dels sentits
els pètals de la fe i de l’extermini.
........................................................................................
III
El límit és mai més. Una emboscada
on la pietat té pressa per marxar.
La vida neix de peu i mor descalça.
La teva mà és un pes, el cos d’un altre.
IV
Es cargola el dolor sobre una tela
que algú ha teixit amb l’esma del perdó.
Sempre és el temps la música dels presos.
La lira del destí no té cap corda.
V
Sobre el crani, la creu, l’indret exacte
per a un l’oblit que viu per oblidar.
Qui mai no ha mort encara no sap res.
El temps dorm sol i té llavis de nàufrag.
poemas de inma marcos
Confinada en Madrid
Imágenes: varias localizaciones / 2015-2019
Amo esos lugares de la infancia
las huellas que ha dejado en mi alma
Amo
A veces
cuando cae la tarde
veo las golondrinas volar desde mi ventana
Enloquecidas
Tan cerca
la libertad
Estoy sólo en la noche
Escucho el canto del agua
Acerco mi rostro a ella
Nada soy
Temblor de luna en el río
A veces se cansa mi corazón
Entonces me detengo y miro al cielo
No olvides mi rostro
Los niños jugaban en la playa
Aún miran más allá
Aún su mirada no se ha detenido
poemas de antonio monterroso
Confinado en Peñarroya-Pueblonuevo (Córdoba)
Imágenes: antiguo Cerco Industrial de Peñarroya-Pueblonuevo / 2016
I
Clarines de soledad altiva,
ancladas al magma del pasado heroico
aguardan sumisas la zarpa del tiempo.
La yerba acecha.
II
Una mota apenas, imperceptible, vuela implacable
a poner su huevo sobre el arrogante trono
del reino efímero de la arcilla,
a reconquistar lo que siempre fue suyo.
III
Con pulcritud rectilínea,
muda la piel el gusano
en el jardín de las ruinas.
La historia, impúdica, pasea sus huesos.
IV
Espectrales falos al amanecer
eyaculan su semen catódico
sobre invisible cielo de acetato.
La clorofila, impasible, aguarda su turno.
V
El viejo cíclope añora los tiempos heroicos,
los bravos guerreros, sus cóncavas naves.
Hastiado de soledad,
no encuentra remedio para su vista cansada.
poemas de gsús bonilla
Confinado en Madrid
Imágenes: La Rioja / 2016
como el renglón donde coincide la superficie terrestre y el cielo
un arpa en la sección de cuerda, los vientos metales los vientos madera
vengo a deciros, que después de la celebración volvimos a las celdas
y es en este espacio donde observo desde cualquier punto alejado
desobedeced las normas cuando escribáis, si el destinatario es otra persona
en toda la extensión de la palabra, si el agua recorre abrupta
igual que un mensaje de esperanza, si miréis donde miréis no se ve otro llanto
que el de un pájaro mudo sin ánimo de nada
me gustaría haber sido antes y dedicar la posterioridad del tiempo
cada segundo de mi otra vida, cada minuto del después
a aquella mujer, a aquellos hijos llenos de espinas y cortezas
manojos de hierba flores y ramas, haces que pudiera coger con mis manos propias
[imbéciles e impedidas
esta es la hora de mi encierro, donde muy al fondo me llega un pueblo, cuatro casas
apartadas, derramadas tal que un vaso con leche, que percibo como una mancha
[irrespirable
al fondo, con su océano de piedras y cadáveres, aleteos guadañas y mariposas
pero no tengo otro miedo que el de no poder nombrarte con mi voz de trompeta, con mi
[boca de vidrio
os animo en la velocidad de este horizonte vértice a que llegue nuestra hora de vernos
a la delicada luz cociente, anhelo de calle y páramos ventana sin cristal por medio
y tocar lo que no está escrito, con la mano anciana hacia la inalcanzable nube hacia al
[insondable sol
hacia el aire esquivo y nocivo hacia algo tan difícil de explicar hoy como lo es un
[abrazo de carne
poemas de gustavo vega
Confinado en Barcelona
Imágenes: Florencia / Siena / 2017
Sombras de soles y un hueco. Hay un no sé qué de espanto
en este vivir, subir o bajar, en el tiempo replegado
de esta vieja escalera que me invita a ir
no sé a dónde.
Apariciones. Desapariciones.
Late el aire al ritmo sordo de un tiempo ya pretérito.
Se fue. Se fue... aunque sus manos de aire aún acaricien
aquella barandilla que quedó colgada del silencio o del descuido.
El recuerdo se funde en el cemento. Viejos emblemas nos festejan la retina.
Podemos imaginar aventuras de antiguos héroes vestidos de hierro sudoroso,
reinos ya dormidos entre el polvo ... o el esfuerzo de un pez solitario dispuesto a
recostarse con la luna. Escalera de bajada, de subida... ¿a dónde?
Oleaje de sombras estrujadas, el dilema, un suspiro ante la instantánea
incerteza del sentido. ¿Aquí ? ¿O... ir allí, o allá? ¿A dónde?
Se bifurcan a cada instante los caminos,
las escalas, los destinos.