Nocturnos
Diapositiva escaneada / 2002
Nocturnos es una serie de diapositivas que hice con cámara analógica, una Nikon F3 y carrete Velvia. Este trabajo se patrocinó por Manual Color de Barcelona en 2004 y se expuso en su laboratorio junto a poemas de mi amigo José Antonio Arcediano.
Decía un gran pintor que el color es un medio para ejercer una influencia directa sobre el alma. El color es la tecla, el ojo el martillo. El alma es el piano con muchas cuerdas. El artista es la mano que, por esta o aquella tecla hace vibrar adecuadamente el alma humana. Con la cámara en la mano cual pincel y con la noche como lienzo, intenté pintar utilizando como óleos las luces de la ciudad.
Poemas para Nocturnos
Se aproxima el momento de lo inerte,
del universo en tablas,
del idilio profundo con la paz.
Es hora de lamerse las heridas,
de la palabra lenta,
de los baños de espuma,
de los juegos prohibidos.
Es hora de pintar con la mirada
sobre el lienzo azulado de un nuevo anochecer..
...........
Los relojes decretan la quietud,
se ensimisman los mercurios,
dos vueltas de cerrojo,
ecos del último telediario
proclaman el descenso,
la ley horizontal, el genocidio
diario de las horas derrochadas.
Un cielo sin fisuras, de pizarra
aún no profanada,
investido de calma,
incrimina a los ojos clandestinos
de aquel que se decide a cometer
el crimen de ser libre.
Confieso que he volado,
que he perseguido rayos de luz inexplicable,
que he descrito fugaces movimientos
nombrando lo desconocido.
Confieso que he vivido
mientras todos dormían.
..........
El fin es el principio.
Cada fibra de lumbre es una brizna
desprendida del árbol ignoto del destino.
La tierra, el fuego, el aire,
el agua, en una orgía
servida por la noche
alumbran el color, paren la luz,
el síndrome incansable de la vida.
José Antonio Arcediano